Claves para mejorar la convivencia familiar
Un tópico como este puede producir un sin número de temas, pero hoy, me voy a centralizar en cuatro cosas, que le permiten a usted trabajar en mejorar la convivencia familiar, aunque el resto no haga nada al respecto. No digo que sea fácil, digo que vale la pena:
1. Enfóquese en uno mismo: Vea lo que usted puede hacer, deje de continuar con sus interminables quejas, válidas o no, porque esto solo daña la relación, y no nos da ningún beneficio.
Cambiemos la estrategia: Voy a hacer lo que mejora la convivencia sin importar lo que otros hagan.
Una historia china habla de una nuera que odiaba a su suegra pues era una déspota con ella. Se acerco al sabio de la comarca y este le dio un veneno que mataría a la señora en algunas semanas. Eso sí, le dijo: Mientras esto suceda tienes que tratarla de lo mejor para evitar sospechas.
A las pocas semanas la nuera volvió para pedirle que hiciera algo para que no se muera, pues la señora ahora tenía una relación excelente, era casi que su segunda mamá. Yo lo que le receté fue agua, dijo el sabio, es el cambio de tu actitud lo que cambió a tu suegra, y ha mejorado la relación.
Así mismo debemos hacer cada uno de nosotros.
2. Acepta a los demás: No puedo pedir que sean quienes no son. Todos, incluyéndote, tienen defectos y producen roces entre tú y ellos.
La solución: ámalos sin condiciones. Podemos tratar de mostrar a alguno, como sus actitudes duelen a otros, pero, si mis palabras solo hablan de crítica y de amargura, nadie va a cambiar.
El aceptar, no es decir: pega patrón. Al contrario, lo que se busca es mejorar la relación sin tener que minimizar los errores de los miembros de ella. Cuando te acepto imperfecto, eso te motivará a hacer lo mejor en mis actitudes para generar una relación más íntima, debido a que deseo obtener eso, debido a que no soy alguien criticado en todo momento.
3. Perdonar: Es imposible que en cualquier relación, en algún momento, tú no dañes emocionalmente a alguien, o que otra persona lo haga contigo. Por tanto, no habrán relaciones más cercanas sin ese ingrediente fundamental.
Escribe en una hoja lo que te hicieron, declara tu perdón ahí y luego rómpelo. No es esencial que el otro pida perdón, ya que a veces puede ni darse cuenta. Lo otro imposible del perdón, es que tú lo hagas tan rápido como lo descubras. No importa si es algo que tú crees lógico o no. Si una persona está dolida por algo, simplemente discúlpate, no debe tener razones que tú apruebes para que lo hagas.
Perdona sin importar si te lo piden, pide perdón, aunque no compartas las razones por las que se ofenden. Tu familia mejorará sin duda.
4. Controla el enojo: El dejar desbordar la ira es claridad de que tu egoísmo está manejando tu vida. Lo hago porque creo que debo “empatar”, con el miembro de mi familia, el desaire que me han dado que me causó la ira. Nada acerca a las familias cuando hay un desborde de ira de alguno de ellos, al contrario, cada vez que uno de estos acontecimientos se da, nos separamos un poquito más entre nosotros.
No es cierto que usted tiene que devolver el agravio que le han hecho. No es cierto que si no hace algo pierde su integridad o algo que se parezca, y entonces tengo que devolver o incluso responder el agravio supuesto o real que se me ha hecho.
Cuatro cosas que hacer que pueden ser complicadas, que tendremos que esforzarnos para cambiar la forma como pienso, pero, les garantizo, que por usted mismo, mejorará infinitamente la convivencia de su familia.