Los 4 rituales funerarios más originales del mundo:
Entre rituales y tradiciones.
La partida de un ser querido es una realidad que se expresa normalmente por medio de la ira, la negación o la angustia. Sin embargo, hay culturas que han decidido transformar estos sentimientos por medio de homenajes coloridos, alegres y musicales para honrar a quienes dejaron huella en su paso por la vida.
En nuestra sociedad la velación del ser querido, en unión de familia y amigos, tiene un componente psicológico muy importante que permite gestionar el dolor que causa su pérdida. Mientras que en otras culturas, el recuerdo de los momentos felices convierten las ceremonias funerales en una auténtica fiesta.
A continuación le presentamos diferentes culturas que conmemoran y celebran la vida de quienes han partido con pintorescas tradiciones:
- En Bolivia, muchos guardan los cráneos de sus seres queridos en sus casas sin ningún tipo de temor, de hecho, las exponen en vitrinas y altares para que los protejan. Durante la festividad de las Ñatitas, celebrada el 9 de noviembre de cada año, los familiares visten los cráneos con sombreros de todo tipo y son coronados con flores ornamentales. Los cráneos se llevan a una capilla especial, en donde se les brinda una gran misa.
- En Ghana, un pequeño país de la costa africana, organizar un funeral es más costoso que una boda. Para empezar, el gran evento se anuncia en vallas publicitarias y asisten cientos de invitados (cuantos más mejor, ya que quiere decir que la persona fallecida fue apreciada). Comida, bebida, música y baile, toda una celebración para acompañar a la familia y honrar al difunto. Además, tienen la tradición de personalizar los cofres, dándoles la forma de algo que represente al fallecido. Así, utilizan ataúdes con forma de bota de fútbol, de coche o incluso de celular.
- En el cementerio de Chichicastenango – Guatemala, decoran y pintan las lápidas de los cementerios con los colores que definen al difunto. Las tumbas de los abuelos se pintan de color amarillo, la de las madres color turquesa, el de las niñas es rosado y el de los niños celeste; los padres, por su parte, tienen asignado el color blanco. El resultado de esta tradición, que mantiene vivo el recuerdo de sus familiares, es un cementerio tan colorido y alegre como un arcoíris.
- La festividad del Día de los Muertos está más viva que nunca en la cultura de México. Tanta es su importancia que fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO. Este día todo es fiesta y alegría, muchos acuden al cementerio con comida, bebida y música para pasar el día y la noche, cantando y recordando al ser querido. El pan de muerto, especialmente elaborado con forma de cráneo y la imagen de la popular Catrina son parte del desfile multitudinario y de apariencia carnavalera, que utiliza la muerte con una intención humorística para celebrar el espíritu de los seres queridos.
En todos los casos, estos rituales funerarios sirven para equilibrar y armonizar el sentido de la muerte y en algunas ocasiones los elementos tradicionales, por extravagantes que nos parezcan, se convierten en homenajes en los que la alegría y la euforia son un bálsamo de esperanza y unión.