Razones para celebrar la vida
Tanto el aniversario de la vida como de la muerte son motivos para celebrar la vida y reunir a las personas que más amamos.
Cada reunión nos recuerda que la vida merece ser compartida. Las celebraciones y aniversarios representan uno de esos momentos. Ambos homenajes están basados en el agradecimiento, que constituye la columna vertebral del gozo, la conexión y la dinámica existencial.
Según cuenta la historia, los egipcios iniciaron con la tradición de celebrar la vida a través de diferentes ritos que, de acuerdo a sus creencias, atraían prosperidad, salud y ahuyentaban a los malos espíritus.
En otras culturas, el aniversario de nacimiento representa el inicio de un nuevo ciclo de vida, mientras que los rituales de despedida son concebidos como la reincorporación a nuestra Madre Tierra.
¿Por qué celebrar la vida?
Conmemorar la muerte es una forma de reconciliarnos con un final inevitable que no podemos controlar, pero sí aceptar a través de homenajes a la vida de aquellos seres que amamos.
Tanto las ceremonias de bienvenida como de despedida nos permiten ser más conscientes y aprovechar mejor el tiempo que tenemos. Esta es una valiosa oportunidad para reordenar nuestras preocupaciones, reflexionar sobre nuestras prioridades y valorar lo que tenemos y a quienes tenemos a nuestro alrededor.
Cada aniversario tiene una íntima relación con el sentido de la vida, aún cuando ya no se está presente. Es entender que su memoria y su legado se mantendrán en el corazón de quienes tocó con su presencia.
Por eso, celebremos cada momento importante, porque lo valioso de la vida es tener la oportunidad de dejar una huella eterna.
Y a usted, ¿Qué recuerdo le gustaría dejar en los demás?
¡Conmemorar la existencia es una señal de vida!