Cada palabra, cada flor es un puente entre los dos, un recordatorio de que la muerte no es un final, sino una pausa en el camino.
El código QR en la lápida del ser querido es otra forma de conmemorar. Es una biografía de amor y recuerdos.
La lápida es un recordatorio de la existencia, impreso en un espacio sagrado entre la vida y la muerte.
Es tradición despedir a un familiar o persona muy allegada con flores.