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Vacaciones escolares: tiempo para conectar en familia

 Vacaciones escolares: tiempo para conectar en familia

Enero llega con una pausa escolar que muchos pequeños esperan con ansias: las vacaciones escolares. En la costa ecuatoriana, este temporada no solo coincide con los días más soleados del año, sino que también se convierte en una valiosa oportunidad para recargar energías, fortalecer los lazos familiares y vivir experiencias diferentes.

 

Le compartimos algunas ideas para aprovechar al máximo este tiempo en familia, sin necesidad de grandes presupuestos.

 

 Planifique los días con una agenda familiar

 

La clave para que las vacaciones familiares sean agradables para todos está en la planificación.

 

Procure que las vacaciones cuenten con actividades variadas que incluyan descanso, diversión y algo de aprendizaje. Aquí del dejamos algunas ideas:

 

  • Visite una playa cercana. Nada como un día de sol y agua para recargar energías.
  • Organice tardes de manualidades: pintar, hacer collares o crear adornos reciclados puede ser muy entretenido.
  • Cocine en familia. Prepare un menú especial donde cada miembro de la casa tenga una tarea. ¿Qué tal unas pizzas o galletas con chispas de chocolate?
  • Disfrute de juegos de mesa ¡los niños tienen una imaginación maravillosa!

 

Salidas cercanas

Los fines de semana son perfectos para explorar lugares  nuevos.

 

  • Haga un picnic en un parque cercano. Lleve una sabana, algo de comida y disfruten del aire libre.
  • Visite museos o zoológicos. Guayaquil cuenta con opciones accesibles y llenas de historia.
  • Organice un paseo en bicicleta o una caminata familiar por senderos naturales.

 

Equilibrio entre el descanso y el aprendizaje

 

Aunque están de vacaciones, es importante que los niños repasen temas escolares para evitar dificultades en el nuevo año escolar.

 

Un tiempo para fortalecer la unión familiar

 

Tenga en cuenta que las vacaciones no son solo para los niños; también son una oportunidad para que nosotros como padres disfrutemos y descansemos.

 

Al final, lo que nuestros hijos recordarán no son los grandes viajes, sino el amor y la conexión que se construyó en esos días simples, pero significativos.

 

Hagamos de estas vacaciones un tiempo de unión, donde cada actividad refuerce los lazos familiares y dejemos recuerdos que nuestros hijos llevarán siempre en su corazón.